Matar a papá, de Carina Bergfeldt

Matar a papá es un libro duro, pero no lo es porque se trate de una novela sobre el asesinato de un progenitor, sino porque desde el primer párrafo del libro ya te sitúas del lado del presunto asesino. El 'papá' en cuestión es un maltratador de mujeres y de sus propios hijos, y la obra no lo esconde en lo más mínimo cuando nos va exponiendo los arrebatos de ira de ese enfermo mental. En realidad, lo más duro de la novela es el maltrato psicológico que recogen algunas de sus víctimas, de cómo dudan a veces de si no tiene el agresor algo de razón o de si no tienen ellas algo de culpa.

El hilo argumental de 'Matar a papá' es la preparación de un asesinato 'justiciero' por parte de una mujer que no terminamos de saber quién es. La verdad se oculta detrás de uno de los tres personajes femeninos de la obra, -dos periodistas y una policía- y sólo se desvela al final. Mientras, la obra narra otro asesinato con visos de ser otro ejemplo de violencia de sexo que investigan las tres implicadas.

La obra de Carina Bergfeldt es tremendamente original al estar enfocada desde el otro punto de vista y sólo quieres llegar al final para ver cómo se hace justicia. Sin embargo, la investigación del otro asesinato no está mal en sí misma aunque sólo sirva para ir conociendo a los tres roles femeninos.

No obstante, 'Matar a papá' no me ha terminado de llegar. A pesar de su éxito arrollador en Suecia, no me ha gustado. Me ha decepcionado un tanto la solución del primer crimen y el final de 'papá' tampoco ha estado a la altura de mis expectativas. La serie sigue, pero lo hará sin mi lectura.