La novela engancha al lector desde el primer párrafo, siendo esta misma muy fluida y sencilla. La trama principal de la historia es una guerra por la supervivencia que deja a un país dividido en 13 distritos controlados por un gobierno "El Capitolio", un lugar donde puedes tener todo lo que quieras tan sólo con un simple abrir y cerrar de ojos. Pero no todo es alegría y felicidad, porque cada cierto tiempo llega la época de los temidos y odiados días oscuros, cuando los distritos deben luchar por sobrevivir y salir de la enorme pobreza en la que se encuentran algunos de ellos. Por todo ello, el Capitolio -gracias a sus enormes recursos económicos y a sus avanzadas tecnologías- consigue hacerse con el control total de 12 de los distritos y la aniquilación del decimotercero y último de ellos. Y para que todos recuerden que los tiempos de los días oscuros no deben repetirse crea "Los Juegos del Hambre" una despiadada competición en la que un chico y una chica de cada distrito deben luchar a muerte sin normas: si pierdes mueres, si ganas tendrás toda la fama y riquezas que nadie pueda imaginar.
Pero no todo será tan fácil, pues ese perverso Capitolio guarda muchas y fascinantes sorpresas. Para asombro del Capitolio, en la elección de los tributos para los septuagésimo cuartos Juegos del Hambre, hay un hecho inesperado. Y este es el punto de partida donde comienza la fascinante e intrigante aventura de los dos protagonistas: Katniss Everdeen y Peeta Mollark.
Es -en definitiva- una novela adictiva, emocionante, conmovedora e impresionante por momentos. Si tuviera que definir su lectura en una sola palabra diría que "Los Juegos del Hambre" es alucinante.
Animo!!! Os invito a que vosotros también podáis convertiros en uno de los personajes de esta fascinante trilogía, desde el momento en que os sumerjáis en su lectura.
Post cortesía de Jorge Urteaga