martes, 30 de septiembre de 2014

Nos vemos allá arriba, de Pierre Lemaitre

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Aunque llegue con retraso, Nos vemos allá arriba era una de esas novelas que queríamos leer y criticar desde esta web. No era tanto por el premio Goncourt que ganó la obra en 2013 o por las espectaculares cifras de ventas que obtuvo en Francia, sino por la curiosidad de saber qué había en esta novela para que se vendiese con tanta facilidad en España.

Para ser sincero, todavía no soy capaz de desvelar todas las claves que me han hecho disfrutar de esta obra desde sus primeros compases hasta la traca final. Es una novela redonda, sin vaivenes literarios, y que se disfruta de principio a fin. La empecé a leer como una novela histórica sobre la I Guerra Mundial, seguí leyendo cuando se convierte en una obra costumbrista de la vida en la posguerra y no pude dejar de hacerlo cuando me vi inmerso en una persecución propia de una novela negra.

Creo que una de las claves de Nos vemos alla arriba es su narrativa, siempre ágil, viva, con unas buenas descripciones de unos personajes de profundas características humanas, y un lenguaje cercano y sin tecnicismos que te permite ver y sentir la acción como si estuvieras presente. La lista de personajes no es larga, ni mucho menos, lo que te permite irlos conociendo poco a poco -incluso adelantar a veces sus reacciones- y los terrenos de juego son básicamente París, el campo de batalla y algunos cementerios repartidos por la geografía gala.

La historia se basa en sucesos reales, pero no podemos saber cuánto hay de verdad y cuánto de novela. El destino junta en el campo de batalla a tres personajes cuyas vidas quedan entonces ligadas para siempre... Nos vemos allá arriba es una novela de obligada lectura quizás, principalmente, por el cuidado trato a unos personajes que te transmiten con su vida los tragos más amargos de la miseria humana, así como algunos de los momentos más alegres de la existencia. Realismo e intimismo en una novela que hay que leer y que no te dejará indiferente.

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